Despojarse!
No estimó el ser igual a Dios, como cosa a qué aferrarse, sino que se despojo así mismo y tomó forma de siervo, y se hizo semejante a los hombres; y estando en esa condición se humillo así mismo y se hizo obediente hasta la muerte y muerte de cruz...
Verdaderamente no hay salvación sin sacrificio y no hay gloria sin cruz. Esta etapa de transición y adaptación nos está llevando a intentar vivir estos versículos de Filipenses 2:5-8. A Jesús no lo humillaron, El eligió humillarse así mismo hasta la muerte, El fue ése varón de dolores, experimentado en quebrando, no por nada, sino para salvación, para que un día toda rodilla se doble y confiese que El es el Señor. Humillarse es vestirse totalmente de una verdadera humildad, porque al humilde Dios lo mira con agrado, al altivo, Dios lo mira de lejos. Por eso, es hermoso éste tiempo, porque Dios me está enseñando la humildad de aquel niño que nació en un pesebre, cuando Jesús pensó en nosotros nos amó tanto! que no le importó las incomodidades terrenales y eligió lo más basto, simple, sencillo y humilde: como nacer en un establo, y como si eso fuera poco, su vida estaba en peligro de muerte, por eso sus padres tuvieron que llevarselo a Egipto, a un país extraño, diferente al suyo, todo lo que tuvo que vivir nuestro Jesús, por amor.
Seríamos capaces realmente de amar así?, En nuestras fuerzas es imposible - podemos ser muy egoístas sin quererlo- pero EL, lo dió todo, lo hizo todo por amor a los perdidos " El vino a buscar y salvar lo que se había perdido" y Hoy, ése plan de salvación continúa, por medio de Su Iglesia, con hombres y mujeres que están dispuestos a pagar el precio.
Que no te asusten los reveses a lo que pueda estar expuesta tu vida, es terrenal. Lucha por lo perecedero, por lo que nunca se acaba, lucha por la fe, la esperanza y el amor y sobretodo porque seas este instrumento de gracia y bendición para otros que aún no se han dejado encontrar por El.
Que Dios te Bendiga y llené tu vida de expectativas eternas!!
Verdaderamente no hay salvación sin sacrificio y no hay gloria sin cruz. Esta etapa de transición y adaptación nos está llevando a intentar vivir estos versículos de Filipenses 2:5-8. A Jesús no lo humillaron, El eligió humillarse así mismo hasta la muerte, El fue ése varón de dolores, experimentado en quebrando, no por nada, sino para salvación, para que un día toda rodilla se doble y confiese que El es el Señor. Humillarse es vestirse totalmente de una verdadera humildad, porque al humilde Dios lo mira con agrado, al altivo, Dios lo mira de lejos. Por eso, es hermoso éste tiempo, porque Dios me está enseñando la humildad de aquel niño que nació en un pesebre, cuando Jesús pensó en nosotros nos amó tanto! que no le importó las incomodidades terrenales y eligió lo más basto, simple, sencillo y humilde: como nacer en un establo, y como si eso fuera poco, su vida estaba en peligro de muerte, por eso sus padres tuvieron que llevarselo a Egipto, a un país extraño, diferente al suyo, todo lo que tuvo que vivir nuestro Jesús, por amor.
Seríamos capaces realmente de amar así?, En nuestras fuerzas es imposible - podemos ser muy egoístas sin quererlo- pero EL, lo dió todo, lo hizo todo por amor a los perdidos " El vino a buscar y salvar lo que se había perdido" y Hoy, ése plan de salvación continúa, por medio de Su Iglesia, con hombres y mujeres que están dispuestos a pagar el precio.
Que no te asusten los reveses a lo que pueda estar expuesta tu vida, es terrenal. Lucha por lo perecedero, por lo que nunca se acaba, lucha por la fe, la esperanza y el amor y sobretodo porque seas este instrumento de gracia y bendición para otros que aún no se han dejado encontrar por El.
Que Dios te Bendiga y llené tu vida de expectativas eternas!!
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