Hageo (Parte 2)

Como estudiabamos la semana pasada, Dios quería que el templo fuera reconstruido y El contaba con los recursos para hacerlo, pero necesitaba manos dispuestas. Dios ha decidido llevar a cabo su obra por medio de  personas como Tú y yo. El proporciona los recursos, pero manos dispuestas deben realizar la obra. ¿Están tus manos a la disposición de la obra de Dios en el mundo? A través de estos versículos vemos que tanto la santidad como la contaminación afectan al pueblo, lógicamente la santidad para producir bendición y la contaminación o pecado para producir muerte. Ahora,  que el pueblo estaba comenzando a obedecer a Dios, Dios prometió que los bendeciría. Pero necesitaban comprender que las actividades en el templo no limpiarían su pecado; sólo el arrepentimiento y la obediencia podían limpiarlo. Si insistimos en albergar malas actitudes y pecados cosecharemos las consecuencias. La vida en santidad  viene  únicamente a traves de un arrepentimiento y conversion genuina, y es el Espíritu Santo de Dios el que vá ayudándonos en éste proceso de santificación, el cual, todos sin excepción pasamos y estamos pasando.  Si tu ves a  un niño comiendo salsa de espaguetti, no pasa mucho tiempo para que la cara, las manos y la ropa estén rojas. El pecado y las actitudes egoístas producen el mismo resultado: manchan todo lo que tocan. Incluso las buenas obras que hacemos para Dios pueden mancharse por actitudes pecaminosas. El único remedio es confesar nuestros pecados  y Dios es Fiel y justo para perdonarnos y limpiarnos de toda maldad.
El    pueblo construyó los cimientos del templo e inmediatamente Dios los bendijo. No esperó hasta que el proyecto fuera terminado. A menudo, Dios envía su bendición cuando damos nuestros primero pasos. ¡El está listo para bendecirnos! (Hageo 2.20-23 ) El mensaje final de Hageo reconoce que Hageo es solamente un mensajero que lleva la palabra del Señor. Está dirigido a Zorobabel, el gobernador de Judá. Se usaba un anillo con sello para garantizar la autoridad y la autenticidad de una carta. Servía como firma cuando era estampado en cera suave en un documento escrito. Dios estaba reafirmando y garantizando su promesa de un Mesías que vendría de la línea de David (Mat 1:17).
El mensaje de Hageo para el pueblo buscaba que reorganizaran sus prioridades, ayudarlos para que dejaran de preocuparse y motivarlos para que construyeran el templo. Al igual que ellos, a menudo colocamos nuestra comodidad personal en una prioridad más alta que la obra de Dios y la verdadera adoración. ¿ Cuales son mis verdaderas prioridades? Buscar su Reino y su Justicia o Buscar mi propia comodidad? Sentirme parte de algo hermoso que El quiere hacer o ser indiferente?  Al igual que ellos, a menudo colocamos nuestra comodidad personal en una prioridad más alta que la obra de Dios y la verdadera adoración.
Pero, Alabado sea Dios!!;  Dios cierra su mensaje para Zorobabel con esta afirmación tremenda: "¡Porque yo te escogí!" tal proclamación es también para nosotros, cada uno de nosotros hemos sido escogidos por Dios. Esta verdad debe hacernos ver nuestro valor a los ojos de Dios y nos debe motivar para que trabajemos para El. Cuando te sienta deprimid@ o quizá sintiendo que estás dando poco,  recuerda:  "¡Dios te ha escogido!" El mensaje de Hageo para el pueblo buscaba que reorganizaran sus prioridades, ayudarlos para que dejaran de preocuparse y motivarlos para que construyeran el templo. Al igual que ellos, a menudo colocamos nuestra comodidad personal en una prioridad más alta que la obra de Dios y la verdadera adoración.
Nunca olvides que fuiste escogida, escogido con un propósito. Dios nos Bendiga!!


Comentarios

Entradas populares de este blog

Hay Esperanza Plena en Jesús

Su Plan es mucho mejor.

Soy pecador! Necesito de Ti Señor!