Creciendo en Cristo



Seguiremos creciendo hasta el fin. No nos cansemos de seguir creciendo! En una ocasión Jesús dijo que, las cosas que Él había empezado en nuestras vidas, Él las iba a concluir.
Leyendo 2 Pedro 3, me llevo a pensar y reflexionar sobre el día que Él Volverá por Su Novia, Su Iglesia.
Esta carta, es una exhortacion o advertencia que hace el apóstol Pedro, donde nos  recuerda que  hemos  sido limpiados en nuestra manera de pensar, y que esa mente purificada  deber ser despertada, para que pueda ser activa y dinámica en el trabajo de la santidad que el Espíritu Santo va realizado en nuestro interior.
En este contexto, habían muchos  burladores, que no creían que Jesus volvería por segunda vez, y se burlaban de la Salvación  que hay en Cristo, igual ocurre hoy en día,... Muchas personas no  creen que Jesús va a venir. Porque no ven ningún cambio, en los que son llamados sus hijos o decimos  temer a Dios, (Salmo 55:19) entonces, todo esto los mantiene en estado de incredulidad. O sencillamente porque piensas que nunca va a pasar. No creen que en el día del fin, todo sera destruido por el fuego. Los cielos y la tierra que existen ahora están, por Su misma Palabra,  esto es tan cierto por venir, como la verdad y el poder de Dios puede hacerlo. Los cristianos somos enseñados aquí en la tierra y confirmados en la verdad de la venida del Señor. Aunque, en la cuenta de los hombres, hay una gran diferencia entre un día y un millar de años, sin embargo, en la cuenta de Dios, no hay diferencia. Todas las cosas pasadas, presentes y futuras, están siempre delante de él: el retraso de un millar de años no puede ser tanto para él, como posponer cualquier cosa por un día o por una hora, es para nosotros.
Como seres limitados que somos, no tenemos el conocimiento o la creencia de que realmente Él Volverá! . Es difícil tener  alguna idea de la eternidad, verdad? Pero, Dios es paciente, para con nosotros, Él no quiere que ninguno perezca y nos está dando más tiempo , para avanzar en el conocimiento y la santidad, en el ejercicio de la fe, paciencia, obras de justicia, padecimientos por su causa, etc. Realmente, un día ante el Trono de Dios, daremos cuenta de todas las cosas hechas en el cuerpo, sea bueno o sea malo.
Que Su Espíritu Santo, nos ayude a caminar con  humildad y diligencia  ante Dios, y haciendo un juicio frecuente de nosotros  mismos, esto muestra una firme creencia del juicio futuro, aunque muchos (Dios nos lo haga ver a tiempo) nos podamos comportar como si nunca fuéramos a dar una explicación en absoluto. ¡Pero la darémos! ése día vendrá, cuando los hombres están seguros, y no tienen ninguna expectativa del día del Señor. Los palacios señoriales, y las cosas deseables que  buscamos  y en las que  aparentemente nos hacen "felices", todas, serán quemadas, todas las obras de los hombres, tienen que ser pasadas por el fuego, que será un fuego que consume  todo lo que el pecado ha traído al mundo, sera a través de un fuego purificador. Me pregunto, y quizá Tu también,  ¿Qué va a ser de nosotros, si ponemos nuestro confianza en las cosas  terrenales? Y que, cuando veamos toda nuestra porción,  quemandose ? Por lo tanto, aseguremonos  de que, la verdadera felicidades va  más allá de este mundo visible.
En los versículos del 11 al 18, se nos exhorta a la pureza y la santidad. Este es el efecto del conocimiento real de Dios, porque no vamos a querer deshonrar Su Santo Nombre. El que esta en Cristo, nueva criatura es, las cosas viejas han pasado, todo es hecho nuevo. Caminemos liberados de la vanidad a la cual, las cosas presentes están sujetas, en especial del pecado que tiene tantas formas! Y si pecamos y caemos, porque éste nuestro cuerpo mortal es tan  débil e imperfecto, pidamos de Su fuerza y Ayuda, Y sobretodo pidamos a Dios nos libre de  aquellos pecados  que están arraigados en nuestra alma, esos que no se ven; entregemosle TODO al Señor! Sólo los que están vestidos con la justicia de Cristo y santificados por el Espíritu Santo, serán admitidos a habitar en este lugar Santo. Él es fiel, y ha prometido a  aquellos, cuyos pecados son perdonados, y su paz hecha con Dios, habitar seguros  y felices en éste mundo y en el venidero; por lo tanto, seguir la paz con todos los hombres; seguir la santidad y la paz. Que  Dios nos encuentre ese día, viviendo en Su  Paz. No seamos perezosos e inactivos, éste es el día, el tiempo en el que tenemos que terminar el trabajo que Él nos ha encomendado para hacer.
Sólo el cristiano diligente será el cristiano feliz, en el día del Señor. Nuestro Señor vendrá súbitamente - sin avisar - como nos hallará, haciendo algo o sin hacer nada?.
Sabes mi herman@, éste tema me ha tocando tanto que le estoy pidiendo al Señor, me ayude a aprender a hacer un uso correcto de la paciencia de nuestro Señor, que aún tarda en venir. Vivimos en un mundo donde es muy fácil  pervertir todo don de Dios. Y a lo malo lo podemos llamar bueno y a lo bueno, malo; Si, con mucha facilidad. Pero  tratemos, de que nuestras mentes preparadas para la recepción de las cosas difíciles de entender,  (tenemos la mente de Cristo, dice el apóstol Pablo) sea Dios, ayudandonos a  ponerlo en practica de una manera sencilla y fácil de entender. Eso, requiere diligencia, sumisión a la autoridad de Cristo, crecer en toda gracia, en fe, virtud, y conocimiento. Conocer a Cristo más claramente y con más detalle; Conocerlo a fin de ser más como Él , y amarlo mas profundamente al punto de que sea Él lo primero y el mas importante en nuestras vidas. . Este es el conocimiento de Cristo, que el apóstol Pablo  deseo alcanzar; y los que degustamos ahora de esa Gracia y   efecto  del conocimiento de nuestro  Señor y Salvador  Jesucristo, surgira de nuestro corazón, una profunda gratitud y alabanza, y nos sumaremos a tributar Gloria a Dios ahora, en plena certidumbre de hacer lo mismo en lo sucesivo , por los siglos.
Es mi oración, que así sea y un día todos, estaremos arrodillados viendo de los cielos descender al que Vive y Vive por Siempre.
A Él sea la Gloria, la Honra y el Honor.
Termino citando los últimos versos de este pasaje, que nos llena de Fe, esperanza y valor.
¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien? Mas también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis, sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros; teniendo buena conciencia, para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, sean avergonzados los que calumnian vuestra buena conducta en Cristo. Porque mejor es que padezcáis haciendo el bien, si la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo el mal. Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu; en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados,
1 Pedro 3:13‭-‬19
Bendiciones de lo Alto!


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